Disponible en Netflix y dirigida por Eléonore Pourriat, directora, actriz y escritora francesa feminista, No soy un hombre fácil es una película basada en el libro Las hijas de Egalia, que plantea una sociedad con un cambio de roles de género, en la que los hombres ocuparían los lugares que ocupamos las mujeres.
La película nos peesenta a Damien, un hombre con actitudes abiertamente machistas que, después de un golpe en la cabeza, se despierta en un universo paralelo donde las mujeres son el género dominante y los hombres sufren nuestras mismas opresiones.
La película toma los estereotipos aplicados al género femenino en lo que a roles de económicos, de cuidados, estéticos y sociales se refiere, y se los aplica a los hombres. Lo mismo que sufrimos cada día millones de personas solo por haber nacido hembras, al verlo aplicado a los varones llama la atención y facilita tomar conciencia de la situación.
Todas las dinámicas de género son puestas en entredicho: Hombres rechazados por no estar depilados mientras las mujeres lucen vello donde crece de forma natural, acoso callejero, violencia sexual, puestos de liderazgo, grupos masculinistas de los que se burlan las mujeres… todo un universo alternativo.

Hay dos secuencias que son bastante esclarecedoras vistas desde el otro punto de vista. La primera es un parto pensado para la comodidad de la mujer, que se ejecuta de pie y no tumbada (postura antinatural para dar a luz según nuestra biología), y la segunda, un encuentro sexual fortuito donde la mujer se ocupa de su propio orgasmo sin tener en cuenta las necesidades de su pareja casual. Vamos, lo que si eres una mujer hetero con una vida sexual activa habrás sufrido un montón de veces…
Aun así, la película no deja de ser una comedia romántica donde el hombre se enamora de la mujer exitosa, adinerada y promiscua que se redime a favor del amor verdadero. Vamos, cómo el típico cliché del amor romántico que nos han vendido durante décadas de «tú enamóralo, que ya cambiará por ti», pero aplicado al revés. Viendo en este papel al hombre necesitando a un mujer a toda costa para ser feliz, la película también hace plantearnos por qué aceptamos esta propaganda de relaciones de pareja desiguales que anulan a las mujeres.
Os dejamos un corto previo de esta directora, donde también se cuestiona este asunto:
El libro Las hijas de Egalia está descatalogado, pero hasta que alguien lo reedite y podamos volver a disfrutarlo, puedes hacerte con la ficción sonora del mismo realizada por el equipo de sangre fucsia, del que no podemos ser más fans.