Aunque te da igual cómo vaya el resto de la humanidad y eres totalmente tolerante con cualquier opción estética, a ti te gusta depilarte el bigote… pero lo que no soportas es la esclavitud que supone andar pendiente de esos pelos impertinentes ni descubrir, en un reflejo a la luz del día, que tienes un mostacho a lo Pablo Escobar para nada intencionado.
Si te gustaría dedicarle el tiempo que corresponde a estas labores, pero no lo tienes (y aunque el bigote esté de moda, aún no te decides a dejártelo), no sufras. Hay una opción fácil y económica para esos pequeños arreglos que salvan la papeleta cuando tienes poco tiempo de ir a hacerte la cera y te da miedo pegarte el tirón en casa: se trata de tu nueva arma de destrucción masiva: The Tinkle Razor
Estas cómodas cuchillas son fáciles de manejar, permiten pequeños retoques en bigote, cejas y demás vello que quieras controlar. Son indoloras y NO, el pelo no te crece más fuerte por afeitarte… ¿o acaso consiguen los barbilampiños densas barbas a base de afeitados recurrentes? No. Pues tu bigote tampoco crecerá más denso por afeitarlo, aunque la industria de la belleza no quiere que lo sepas.
Aquí te dejamos un tutorial para que veas cómo utilizarlas y, si te animas a comprarlas, en este link pueden ser tuyas.
Me afeité el bigote y esto fue lo que paso: que la piel de la cara se quedó súper suave y el apurado de la cuchilla fue perfecto. ¡Dale una oportunidad!